Breitling Superocean Bronce 42mm N17375201L1S1

Breitling Superocean Automatico Bronce 42mm N17375201L1S1

El nuevo Breitling Superocean Bronce Automático 42mm N17375201L1S1 aporta rendimiento y estilo a todas sus actividades acuáticas, en los años 60, el buceo se puso de moda; era un nuevo deporte.

Para los buceadores, el tiempo lo era todo y Breitling se propuso ofrecerles el reloj de buceador más claro posible, eliminando cualquier característica que no sirviera para salvar la vida bajo el agua.

Este reloj simplificado se denominó "Slow Motion", conservando las líneas limpias, los índices luminiscentes gruesos, las agujas cuadradas y el anillo de la esfera de alto contraste, todo ello orientado a la máxima legibilidad.

Práctico, sí, pero lo que realmente enamoró a todo el mundo del nuevo Superocean fue su aspecto: el nuevo Superocean retoma los famosos códigos de diseño del Slow Motion, añadiendo al mismo tiempo elementos modernos como un bisel con incrustaciones de cerámica y esferas de colores vivos.

Sus grandes agujas e índices en Super-LumiNova® luminiscente permiten una fácil lectura bajo el agua, el reloj es resistente al agua hasta 300 m (1000 pies), y es resistente a los golpes, la arena y el agua salada. La versión de bronce utiliza una aleación especial que ofrece una excelente resistencia a la corrosión, pero que con el tiempo desarrolla una sutil pátina que hace que el reloj sea aún más único.

Las dos opciones de correa (caucho y brazalete metálico) cuentan con un cierre de mariposa que permite microajustes de hasta 15 mm para facilitar su uso sobre ropa impermeable y trajes de neopreno.

Su bisel con incrustaciones de cerámica a prueba de arañazos nunca se desgastará ni decolorará y, para mayor seguridad, el bisel es unidireccional en la mayoría de los tamaños y bidireccional con un bloqueo patentado en el modelo de 46 mm.

Lo mejor de todo es que ya no es estrictamente un reloj de buceo: puede hacer surf, nadar, ir al chiringuito y luego ponérselo para cenar. El Breitling Superocean equilibra a la perfección la nostalgia de su herencia con un aspecto nuevo y fresco.